El Comodín

 Una vez un tío de apellido español me preguntó, ¿Quién sos? Uff... Vale tío, aquí vamos.

Resumiendo, según mis familiares muy lejanos, los anónimos y sensacionalistas redactores del Génesis, afirman en el antiguo testamento que básicamente Dios creó al mundo en 7 días y en esta secuencia:

Día Uno       - Noche y Día
Día Dos       - Cielo y Mar

Día Tres       - Árboles

Día Cuatro   - Sol y Luna

Día Cinco    - Pescado y Aves

Día Seis       - Humanos y animales

Día Siete      - Descansó.

 La noche del quinto día esta voluntad creadora enfrentaba un pequeño inconveniente. Él tenía la idea del hombre pero aún no lograba resolver las identidades y sus roles en el tablero de la vida. Durante la mañana del sexto día, esta energía superior llamada por algunos "Dios", meditaba mientras jugaba con un mazo de cartas en sus manos. Él intuía que sucedería y así fue. La inspiración se manifestó en un impulso involuntario ¡Voila! Para bien o para mal, el señor barajó todas las ideas en el mazo de cartas y las ordenó de manera tal que cada una vibra en una frecuencia distinta según la posición astral o vibración del universo en el momento de llegar a la tierra a habitar un cuerpito. De esta manera ordenó a cada carta con una frecuencia en particular, así aparecieron de a poco los dos, los sietes, las reinas, los nueves, los reyes, así hasta completar las 13 figuras. Luego según sus semejanzas las fue agrupando y dividiendo según la ley de la tétrada. Los cuatro palos tendrán correspondencia con las cuatro estaciones naturales del planeta recién creado. Los picas nacerán durante el invierno, los tréboles durante la primavera, los corazones durante el otoño y los diamantes durante el verano, también, bajo la misma ley le otorgaría cuatro puntos cardinales para ubicarse en el planeta y para poder comprenderse a sí mismos, el quadrivium. Así pondría en sus manos las cuatro ciencias sagradas. (Aritmética, geometría, astronomía y música) magias de otro universo.

 Este crupier divino repartió en un orden muy llamativo para las matemáticas del tiempo. Tomemos la referencia de que una vuelta al sol representa un año y tarda 52 semanas de 7 días o 365 días. Con estos simples datos podemos descifrar los números divinos de la baraja detrás de toda la creación.Sume a todos los personajes de la baraja, es decir, los 13 tréboles a los 13 Diamantes a los 13 corazones y a las 13 picas, la suma da 52. ¡Voila! 52 semanas, si analizamos en detalle el número 52 veremos que es un disfraz del número 7. Es decir, 52 = 5 + 2 = 7.  Los ojos más atentos podrán ver aquí la música del universo, la rueda de la vida, el tesoro al final del arcoiris, el "Doremifasolasi" de lunes a domingo, todas las vibraciones vuelven en el 7 a ser 1. 

El 7, los 7 colores, las 7 notas, los 7 días, son el ciclo infinito e ilusorio en el que vivirán estos personajes, después del domingo siempre será lunes, siempre será DO después del SI. 

Observando la composición del 7 podemos ver con más claridad este punto. 7 = 7 + 6 + 5 + 4 + 3 + 2 + 1 = 28 (2+8=10) luego, 1+0=1. UNO. El origen de todas las cosas, la creación. El uno o la unidad es el código que este gran arquitecto universal lleva en su esencia, es por eso que las barajas no traen el número uno, en su lugar, una representación directa de él mismo, el AS.

El As es el número 13 y el 1. Él tiene la cualidad de completar la jugada en el origen y en el final. Es en sí mismo la pieza de la baraja que cierra el círculo de la muerte y el nacimiento pero ante todo el As es la pista divina de la interpretación del juego. Él es el dato implícito que expone toda la ilusión de la escalera de Penrose (escalera infinita). Esa es su misión.

Un ejemplo de uno de los tantos Ases que vinieron al mundo es Jesús. Él es el apóstol número 13. El hombre que atraviesa la ilusión de todos los ciclos. Quien trae la esencia del 1 (Vida-Creación) y el 13 (Muerte-Destrucción) en sí mismo.

 El número 13 me lleva a pensar demasiadas cosas, pero en particular en los Incas, porque en un viaje que hice en algún verano al mach pichen, me explicaron que los Incas usaban un calendario distinto, tenían 13 meses y todos de 28 días (como los ciclos menstruales, también es un mes lunar, de una luna llena a la otra hay 28 días y sobre todo 28 es 7!!! ¿Recuerdan?, es decir que representará una infinidad de ciclos de la tierra que vuelven a 1).

Muchos calendarios antiguos estaban ordenados de este modo lunar tan preciso, el egipcio por ejemplo, que es una derivación del calendario Sumerio. Sin embargo aquí las civilizaciones actuales consideran que les falta un día y que cada cuatro años les faltarán dos días en un año bisiesto. Lamento informar que estos culiaos están en lo cierto, pero este Dios, crupier divino, ludópata y visionario por excelencia, cuando barajó las cartas ya sabía que estaba buscando. Todo esto roles definidos sería muy predecible, estático y el señor quería rumba en su planeta y rumba tendría. Por lo que a ese día que le faltaba a la baraja lo representaría con una curiosa figura; el comodín.

 Yo creo que tanto las cartas como las 7 notas musicales son magia, ideas de otro universo anterior aplicadas en este. Si seguís investigando encontraras más señales.Suma todos los valores de un palo. 1+2+3+4+5+6+7+8+9+10+11+12+13= 91. La cantidad exacta de días de una estación, o de un ciclo, es decir, 91 = (9+1 = 10 = 1+0)= 1. Una vez más al origen o al final. Entonces completando 13 lunas [13 =1+3= 4 estaciones y 4 = 1+2+3+4 = 10 y 1+0 es 1!] empezará una nueva vuelta al sol, curiosamente 364 = 3+6+4 = 13, ¿13? ¿Recuerdan quién y qué es el 13?...

  

 364, 365, 366... 

 ¿Por eso será que las barajas traen 2 comodines?, ¿Por los años bisiestos?... No sé, no creo en las casualidades pero esa es otra historia, sin embargo, los comodines llevarán en su esencia la pista arcaica que vincula las 7 notas musicales y las cartas con el chango del más allá.

 Así un buen día mientras unas amigas separaban los comodines de una baraja para jugar, me di cuenta que en esta baraja de cartas del señor yo era un comodín. 

La pregunta seguramente será ¿Qué carajo representa un comodín?... 

El comodín es el bufón de la baraja del que poco sabemos. No es precisamente trébol ni diamantes ni picas ni corazón, tampoco es un cinco o diez, ni rey ni reina, aunque podría serlo si así lo requieren las circunstancias, en realidad. Estoy seguro que ni el comodín, ni su creador, reconocen sus límites, porque su número es "X", por lo tanto, podría ser cualquier número. Su componente principal es el azar, lo que lo vuelve una versátil e impredecible figura y aunque este pequeño bufón puede aportar el caos o el orden sobre el estricto tablero de los roles determinados por el arquitecto de este gran juego, también puede, simplemente, no aportar nada, por lo tanto, esta simpáticafigura solitaria participe o no del juego, seguramente podrá ser retirado sin que nadie lo eche de menos.  

Por naturaleza todos los juegos a los que he jugado en la vida fueron desde mi carácter de comodín y desde entonces, me he sentido tan cómodo y feliz como un comodín aunque, hasta ahora, no sepa a qué mierda vine a la tierra. Es más, lo único que tenía valor hasta ahora era mi superidentidad secreta de comodín que la estaba revelando. Por lo que la respuesta al dogor fue:  -Joder tío, soy un comodín, pero no os contéis nada a nadie, ¿Vale?!-

  Y vosotros ¿que sois?...

*Inspirado en incontables historias de cerveza negra, numerología intuitiva, vicios matemáticos, en encuentros causales con información gnóstica, en el Principe, en Gaarder, en varias respuestas recicladas del basural ideal de cortazar  producto de algunas horas de juego con la calculadora.

Alan,
absurdos relatos de.. .   .     .       .